viernes, 24 de febrero de 2012

Cry, the Beloved Contry (Llanto por la tierra amada) - (1995) - (Director: Darrell James Roodt)





TÍTULO ORIGINAL:  Cry, the Beloved Country
AÑO 1995 
DURACIÓN: 108 min. 
PAÍS:  Suráfrica.
DIRECTOR: Darrell James Roodt.
GUIÓN:  Ronald Harwood . (Novela: Alan Paton)
MÚSICA:  John Barry .
FOTOGRAFÍA:  Paul Gilpin.
REPARTO:  James Earl Jones, Richard Harris, Charles S. Dutton, Ian Roberts, Vusi Kunene, Leleti Khumalo .
SINOPSIS:  En 1948 se aprobó el apartheid en Sudáfrica. De esta forma, el racismo se institucionaliza y hace imposible la convivencia entre la población blanca y la negra. Dos años antes de este suceso, dos hombres con un fuerte temperamento se conocen debido a una preocupante circunstancia. El hijo del sacerdote negro Stephen Kumalo (James Earl Jones) es detenido y condenado a muerte por asesinar al hijo de James Jarvis (Richard Harris), un terrateniente blanco. La primera reacción de Jarvis, cegado por la muerte de su hijo, es la venganza y el odio racial. Pero poco a poco irá cambiando de idea según conoce a Stephen, que le suplica por la vida de su hijo.  Un emotivo drama con fines didácticos, protagonizado por dos actores portentosos. Está rodada en espectaculares paisajes naturales. Se trata de una visión humana y positiva que significa un alegato en defensa de la tolerancia racial. La música es del prestigioso John Barry, autor de la composición musical de Memorias de África.

Comentarios:
Y de repente descubres una película que no entiendes como ha pasado sin pena ni gloria ya no solo por las salas de cine, si no que creo que nunca la han dado por televisión.
En el año 1948 se aprobó en Sudáfrica el llamado apartheid que impedía la convivencia entre negros y blancos, los negros no podían pisar las zonas destinadas a los blancos y viceversa. De esa manera se hace legal una situación que muchos blancos añoraban... ¿Qué es eso de mezclarte con un ser inferior que sólo crea problemas. Este largometraje, basado en la homónima novela de Alan Paton, sitúa una irónica situación producida entre personas de esas dos etnias.
La película transcurre en Sudáfrica en 1946. Dos padres interpretados estupendamente por Richard Harris y J.E. Jones, cuyas vidas se cruzan por culpa de sus hijos. Richard Harris es rico terrateniente; su hijo, activista que lucha por la igualdad racial en su país, es asesinado por los negros; ironía que endurece sus prejuicios. James E. Jones es un reverendo negro, bueno, piadoso que vive en el campo. En una visita descubre que su hijo se encuentra implicado en el asesinato del hijo de Harris y es condenado a la horca.
Dos grandes actores: James Earl Jones y Richard Harris, confrontan la personalidad noble y vulnerada de un hombre de iglesia, contra el carácter recio de un terrateniente que acaba de perder a su hijo a manos del hijo de aquél. Está próxima la época infame del Apartheid y este hecho presagia el endurecimiento de los colonizadores europeos contra los nativos en desventaja.

Jamás comprenderemos que un hombre pueda ser rechazado por el simple, y natural hecho, de tener un color de piel distinto. Esto da cuenta de una invidencia humana que no tiene límites. ¿Cuántos siglos, y cuantas vidas más, tardaremos en comprender que todos somos hermanos?

La historia, aparentemente un alegato antirracista, se transforma en una reflexión sobre como las personas, aunque educadas con unos determinados valores, cambian o son sacudidos por las situaciones en las que se ven inmersos, así el chico negro educado en la tolerancia racial y en la bondad por un presbítero negro ocasiona una tragedia violenta, mientras que el hijo blanco de un acaudalado terrateniente afrikaneer es un activista blanco en pro de los derechos de todas las razas...

Esta es la clase de cine que se merece un lugar en la memoria de todos los hombres.


Trailer:



Calificación: 4 de 6.

No hay comentarios:

Publicar un comentario